Documental ecuatoriano "¡A un dólar! ¡A un dólar! La ciudad sin corazón" fue premiado en Festival MIAX celebrado en México
Quito, 01 de marzo de 2016
Nota de Prensa No. 002
IV Festival internacional MIAX ha concedido al documental ecuatoriano “¡A un dólar! ¡A un dólar! La ciudad sin corazón” el premio como el mejor Mediometraje Internacional del Festival en México, desarrollado del 12 al 20 de Febrero de este año.
A lo largo de cuatro años, la Muestra Independiente Audiovisual de Xalisco (MIAX) es un festival que permite ser ese espacio entre los realizadores independientes y público, fomentando la mayor proyección y difusión del cine independiente. La proyección del documental ecuatoriano tuvo una gran acogida entre la audiencia de Guadalajara, ya que la temática no les es ajena. De hecho, la buena calificación del público a la película motivó al jurado para que el documental fuera elegido ganador en el MIAX 2016 en su respectiva categoría.
El documental ecuatoriano “¡A un dólar! ¡A un dólar! La ciudad sin corazón” de la Directora española María Aguilera Reche y producido por el ecuatoriano Miguel Ángel Narváez, nos muestra la realidad del comercio informal en el Centro Histórico de la ciudad de Quito, en donde se exhibe la realidad de los comerciantes autónomos.
Miguel Ángel Narváez concedió al IEPI una entrevista para conocer más de su obra. Manifestó que el documental nace por una convocatoria realizada por el Consejo Nacional de Cine del Ecuador (CNCine) para apoyar económicamente a proyectos audiovisuales, en donde su propuesta resultó ganadora en la categoría de ‘Producción de cortometraje de ficción, animación y documental’, lo que permitió desarrollar la primera fase de producción de este documental social.
Luego el proyecto fue seleccionado en el área audiovisual dentro de la convocatoria pública convocada por la Secretaría de Cultura del Municipio de Quito (SECU), entregando un aporte económico que se sumó a su presupuesto. Finalmente, para culminar la obra recibieron apoyo económico del Ministerio de Cultura y Patrimonio para financiar una parte de la postproducción. “Los demás gastos los costeamos nosotros mismos, pidiendo préstamos a personas cercanas y haciendo otros quehaceres profesionales hasta reunir el presupuesto requerido», agregó Narváez.
Miguel Ángel nos cuenta sobre el documental
<< El mensaje era visibilizar el modo cómo las autoridades y los medios de comunicación estigmatizan y criminalizan a los comerciantes “informales” >>
El productor ecuatoriano Miguel Ángel Narváez considera que el comercio autónomo, por un lado, genera oportunidades laborales para muchas personas excluidas del mercado laboral formal; y, por otro acarrea problemáticas con autoridades municipales que ven en esta práctica el uso inapropiado del espacio público. Narváez manifestó que los “estigmatizados comerciantes informales”, en su mayor parte, son personas que con mucha fuerza de voluntad y mucho ingenio lo que hacen es crear una fuente de ingresos para sí mismos y para su familia.
La cinta muestra todas las caras de esta problemática desde sus diversos protagonistas: vendedores, policías metropolitanos, concejales y ex alcaldes. Pero al mismo tiempo, propone soluciones alternativas desde la perspectiva de la economía popular y solidaria.
El documental ha sido difundido en Ecuador desde la promoción de su temática, a través de instituciones públicas y privadas, festivales, universidades y colectivos interesados en el tema propuesto, o en temas de derechos humanos, medio ambiente o de género, entre otros. Se han realizado alrededor de 70 proyecciones acompañadas de foros en varias ciudades del país, lo que les ha permitido detectar la enorme inquietud que existe en la mayor parte de la ciudadanía alrededor de la cuestión de ¿para quién son las ciudades? El estreno a nivel nacional será el viernes 25 de marzo, anunció Narváez.
Con respecto a la actualidad del cine en el Ecuador, el productor comentó que antes de que funcionara CNCine el país recibía dos o tres producciones cinematografías anuales, pero que desde hace cuatro años atrás la media es de 14 obras que se exhiben anualmente en salas comerciales y alternativas. “No somos aún una industria pero estamos encaminados hacia eso. Todo esto se lo debemos gracias al trabajo tenaz y constante del gremio de cineastas, sobre todo de sus primeros miembros que lograron crear la Ley del Cine y a través de ella el Consejo de Cinematografía” enfatiza el productor.
<< El cine ecuatoriano es apreciado en el exterior, muestra de ello es que muchas de nuestra producciones son reconocidas y galardonadas. Cada vez más gente observa nuestras idiosincrasias, nuestras costumbres, nuestras tradiciones, nuestras ciudades, nuestros campos, nuestros defectos, nuestros sentires, lo que en definitiva nos reafirma como cineastas y seres humanos dentro y fuera del país. >>
Narváez también destaca la labor del IEPI pues considera que es indudable el cambio que existe en materia de propiedad intelectual cuando esta institución ha exigido a los comerciantes de videos que respeten los derechos de autor de los productores nacionales y que sus productos cinematográficos se comercialicen a un precio estándar dentro del Ecuador.
<< Esto sin duda ha beneficiado enormemente a la producción nacional del cine, pues ha sido la punta de lanza para que otras instituciones como la televisión, respeten los derechos de autor y los coticen mejor que antaño, aunque aún hay mucho por hacer>>
El IEPI en su propósito de apoyar la difusión de las producciones nacionales valora y agradece los espacios otorgados por los actores de la industria cinematográfica del país para así lograr que los ecuatorianos conozcan más sobre su trabajo y proyecciones.
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