Ecuador trabaja por la inclusión de las personas con discapacidad
Hoy se conmemora el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, una fecha proclamada por la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) con el objetivo de llamar la atención y movilizar apoyos para aspectos clave relativos a la inclusión de personas con discapacidad en la sociedad y en el desarrollo.
Para sumarse a la inclusión de este grupo, la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) aprobó el Tratado de Marrakech el 27 de junio del 2013. Este acuerdo es para facilitar el acceso a las obras publicadas a las personas ciegas, con discapacidad visual o con otras dificultades para acceder al texto impreso.
No solo las personas ciegas o con discapacidad visual se benefician con este tratado. También quienes no puedan de otra forma, por una discapacidad física, sostener o manipular un libro o centrar la vista o mover los ojos en la medida en que normalmente se considera apropiado para la lectura.
En el país existe una Secretaría Técnica de Discapacidades (Setedis), cuya razón de ser es mejorar y fortalecer la calidad de vida y los derechos de las personas con discapacidad. Justamente la próxima semana, desde el lunes 8 hasta el jueves 11 de diciembre, realizará las jornadas Hacia la Accesibilidad Universal en el Ecuador. El objetivo es crear competencias en los profesionales encargados de implementar proyectos de accesibilidad a nivel nacional, acorde a sus especialidades/competencias específicas.
Además, el Setedis maneja la Misión Solidaria Manuela Espejo, “Este programa inscribió, como un hito histórico, el Primer Estudio Biopsicosocial clínico y genético de las personas con discapacidad en el Ecuador, en su propio entorno familiar y social, teniendo en cuenta sus reales necesidades”.
Por su parte, la Biblioteca de las Fuerzas Armadas (ESPE) trabaja en pro de este grupo social. Tiene una base de 20 mil textos traducidos a sistema Braille o a audio-libros o a texto electrónicos que están distribuidos a nivel nacional donde funcionan asociaciones de ciegos. No solo hay obras internacionales. También tiene literatura ecuatoriana. “La intención nuestra es que accedan a libros en audio pero con voz humana, porque se los puede encontrar con voz electrónica”, asegura María Inés Valenzuela, bibliotecóloga de la ESPE.