Quito, 24 de agosto de 2016
Nota de Prensa No. 041

Fernando Escobar Páez, escritor, poeta y periodista ecuatoriano, cuyo libro de relatos Miss O´gginia ha cosechando opiniones diversas, desde la de genio iluminado hasta la del gamberro sexista, habló con nosotros sobre su obra, presente y proyecciones de la literatura ecuatoriana, y la labor de vivir de la literatura.
Su estilo, tildado de provocador, escatológico y estrambótico, al mismo tiempo que de humorístico, caustico y original, no ha dejado de incitar más de una crítica. Los ganadores y yo es el primer poemario de Fernando Escobar Páez, editado en el año 2006. Fernando, muy crítico con su obra, nos cuenta que no tiene mucho aprecio por este texto; considera que lo publicó apresuradamente y, a día de hoy, solo rescata algunos poemas. Lo que más valora de la experiencia es que el libro, ante la falta de espacios editoriales, fue publicado bajo el sello editorial independiente Machete Rabioso, el cual fundó con algunos amigos.
En 2011 publica su segundo trabajo, Miss O´gginia, obra que ha sido traducida a varios idiomas y se ha editado en España, Argentina y Chile – actualmente, existen tratativas para publicarlo también en México-. Es un libro que tiene un carácter vivencial muy fuerte, en el que Escobar describe una etapa complicada de su vida, marcada por las adicciones y la depresión. Lo escribió como un medio de catarsis para no volverse loco, nos contó.
El libro ha sido calificado de grotesco, lleno de odio y de rabia, lo que le acarreado más de un lio con algunos lectores muy susceptibles que no han escatimado insultos y críticas a través de las redes sociales, nos dice Escobar Páez: «estoy acostumbrado a estas situaciones, sobre todo, me divierten mucho». Para él, son el resultado de «la mojigatería y pacatería del medio»; considera que es por esta razón que en extranjero valoran de otra forma la obra, «más allá de la obscenidad y el morbo, hay que entender el discurso oculto tras el texto».

Pese a que su obra se vende bien, considera que todavía en el país es muy difícil vivir de la literatura: «Si quieres sostener tu trabajo literario, necesariamente tienes que tener otra labor que la sustente, una fuente de ingreso complementaria que te permita vivir». Por el momento, ha dejado de lado escribir narrativa y poesía para volcarse a escribir artículos periodísticos sobre temáticas que le apasionan como el rock, el arte y los libros, para algunos medios independientes, pero desgraciadamente muchas de estas experiencias no son remuneradas, nos cuenta.
Con respecto al momento que vive la literatura ecuatoriana, el escritor nos comenta que los sellos editoriales independientes han tomado bastante vuelo. Resalta la labor  de editoriales como Doble Rostro, en la cual realizó la primera edición de Miss O´gginia; Turbina, iniciativa de Juan Pablo Crespo, y La Caracola, de Yanko Molina; y de autores como Adolfo Macías, Sandra Arraya, Daniela Alcívar Bellolio y autores consagrados como Javier Vásconez y Huilo Ruales en narrativa, y Juan José Rodinás, César Eduardo Carrión, Santiago Vizcaíno, Carla Badillo y Andrés Villalba en poesía. «Hay autores muy interesantes que están surgiendo, aunque no todo sea de gran nivel, sobre todo en poesía. Hay mucha desesperación de los jóvenes autores por publicar. No está mal, pero les falta la calidad que solo el ejercicio constante de la escritura te otorga».
Actualmente, Fernando está trabajando en un libro sobre Mamá Vudú, una de sus bandas favoritas. «Quiero sacar un material chévere sobre esta agrupación clave dentro de la escena del rock ecuatoriano». Y, a futuro, pretende seguir colaborando con La Barra Espaciadora, proyecto al cual le tiene mucho cariño, así como continuar buscando nuevos derroteros literarios y periodísticos.

#LiteraturaEcuatoriana

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